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Lo que Europa puede aprender
de la política económica de Argentina

30 de julio de 20123 — En su videoconferencia internacional del 27 de julio, el director de EIR para Iberoamérica, Dennis Small explicó que se puede entender fácilmente el odio homicida de los británicos hacia los dos gobiernos Kirchner —el de Néstor (2003-2007) y el de Cristina (2007-presente) viendo dos gráficas que son ejemplares.


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Los países del sur de Europa que siguieron los dictados de la Troika (el FMI, el Banco Central Europeo y la Unión Europea) al pie de la letra para recortar el gasto público y renegociar su deuda especulativa supuestamente para reducir su proporción con el PIB, todos terminaron con una proporción de deuda/PIB mayor como resultado de esas políticas dementes. Desde el 2003 hasta la fecha, la deuda de Portugal respecto a su PIB subió en 114%; la de España creció en 81%; la de Grecia, en 65%; y la de Italia y Chipre subió en 25%.

Argentina, que adoptó una política exactamente contraria e impuso una renegociación soberana con una quita del 60% de su deuda de $85,000 millones de dólares, redujo su proporción deuda/PIP en 72%. La proporción actual de Argentina es de 43%, comparado con el 87% para España y Chipre, como 130% para Portugal e Italia, y 160% para Grecia.


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El efecto de esas políticas en sus economías físicas respectivas se indica con el parámetro fundamental del desempleo juvenil. En las naciones del sur de Europa, durante la última década se cuadruplicó el desempleo juvenil en general, de un rango de entre10 a 15% a un rango del 40 a 60% actualmente. En Argentina, bajo la política de los Kirchner, que hace hincapié el desarrollo industrial orientado por la ciencia, el desempleo juvenil bajó en casi la mitad, de un 35% desde que Néstor Kirchner asumió el cargo en 2003, a menos del 20% actualmente.

 

No es de sorprender entonces que el imperio británico pretenda eliminar al gobierno de Kirchner de la faz de la tierra, antes de que otros en Europa se les ocurra la idea de que realmente hay vida después de la muerte del FMI y del euro.