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NOTAS [1] La guerra del secretario de Defensa Robert Strange McNamara en Indochina fue una expresión de la doctrina económico–militar utopista que se instrumentó por primera vez, en el bombardeo estratégico generalizado de blancos civiles en tiempos de guerra, con el primer ministro Winston Churchill, y con el bombardeo incendiario de tales blancos como Tokio, y el bombardeo nuclear contra blancos similares por parte del presidente Harry S. Truman. McNamara y otros revivieron esta doctrina utopista, luego de que el presidente antiutopista Dwight Eisenhower terminara su segundo período presidencial. El asesinato del presidente John F. Kennedy le permitió a McNamara y a otros darle marcha atrás a la política de Kennedy de retirarse de Indochina. Una vez que eso cobró vida de nuevo, la política bélica de mediados de los 1960 fue el marco en el cual se echaron a andar, en las últimas semanas de 1964, las políticas económicas utopista que llevaron a lo de 1971–72.
<<--Regresar [2] El miembro típico de la familia de clase media hoy día está tan obsesionado con la idea de recibir ingresos de sus "carteras financieras" personales, que tiende a asociar la noción de economía nacional con las ganancias reales o imaginarias que pueda hallar en el mayor de todos los casinos de apuestas, conocido como "los mercados financieros". La popularidad de que gozan las apuestas legalizadas entre los gobiernos estatales es un síntoma de la influencia extendida de esta enfermedad mental de "la magia del mercado". "¡Qué pasa en los mercados?", es el grito de guerra a mitad del día, aun entre una porción asombrosamente grande de los miembros del Congreso estadounidense durante sus deliberaciones de algún asunto importante, ¡cómo la seguridad nacional estadounidense! Esto es comparable a la demencia generalizada de las burbujas de John Law y de las islas del Mar del Sur en el siglo 18, que empobrecieron a tantos en Francia e Inglaterra, o a la estafa del Land Bank de Martin van Buren en el período del Gobierno de Andrew Jackson. De pocos sesentiocheros en ese segmento de población puede decirse que en ellos habite el "sano juicio" al considerar asuntos del ingreso y el estilo de vida. [3] Carl F. Gauss, El teorema fundamental del álgebra (1799), en Carl Friedrich Gauss Werke, Vol. III (Hildesheim, Alemania: Georg Olms Verlag, 1981). La referencia tiene que ver con el descubrimiento de Leibniz del principio fundamental del cálculo perfectamente infinitesimal, el principio de acción física mínima universal. La forma en que Leibniz aborda las implicaciones de la catenaria, en tanto expresión de una geometría física del espacio–tiempo, en vez de una cartesiana, es la característica subyacente del dominio complejo, del modo que se concebía antes del impacto de la obra de Gauss, Abel, y la atención que Riemann le prestó a las implicaciones de dicha obra. [4] La doctrina del siglo 20, de que la mente humana no representa más que un proceso mecánico, le debe su popularidad actual principalmente a los devotos adoradores del Principia mathemática de Bertrand Russell, como los profesores utopistas orwellianos Norbert Wiener y John von Neumann. Destacan los "Elmer Gantry" de la secta de la "inteligencia artificial" del Instituto de Tecnología de Massachussets (MIT), los profesores Marvin Minsky y el seguidor de Karl Korsch, Noam Chomsky. Korsch, un comunista prominente de los 1920, fue, junto con Rudolf Carnap, fundador de esa escuela de lingüística y mentor del José Stalin de la Unión Soviética en la publicación que éste hizo sobre lingüística. En 1938 Russell convocó a una reunión de su proyecto de "unificación de las ciencias", que fue copatrocinado por Robert M. Hutchins de la Universidad de Chicago, en la Universidad de Pensilvania. Participaron los fundadores de la secta de la lingüística, Korsch y Carnap. Uno de los muchos resultados notables de esa reunión fue la creación de una escuela de lingüística en esa universidad, dirigida por el patrocinador de Noam Chomsky, el profesor Zellig Harris. Más tarde, como producto de la conferencia de 1938, se estableció en el MIT el mentado proyecto "cibernética" de la Fundación Josiah Macy, Jr., el RLE, con Norbert Wiener como figura totémica, Chomsky y Minsky como residentes, y el ex ultracomunista Karl Korsch asechando como una bruja desde un lugar cercano. Sin embargo, la figura principal que se destaca en los comentarios sobre el verdadero desarrollo de la secta adoradora de la "inteligencia artificial" ha sido John von Neumann, cuya obra póstuma The Computer and the Brain se ha convertido en la principal referencia para propagar esa locura entre los círculos de la secta del ET y de la "ciencia aflicción" actuales. El rasgo común del problema, desde Euler hasta el "neocartesiano" Chomsky, lo ha representado la idea radicalmente reduccionista de que todo conocimiento puede generarse a partir del núcleo de la defensa de Lagrange del concepto erróneo de Euler conocido como la doctrina de la supuesta falsedad de los "números imaginarios", un dogma de los empiristas que Gauss demolió en su revolucionaria declaración de 31 páginas de 1799, El teorema fundamental del álgebra. Después de Gauss, apuntalado por la obra de seguidores suyos tales como Lejeune Dirichlet y Bernhard Riemann, y luego de los descubrimientos pertinentes de V.I. Vernadsky, la demostración matemática de que la mente humana representa un espacio–fase que está por encima del dominio abiótico de las computadoras, y también por encima del dominio biótico en general, debe considerarse como plenamente establecida entre los científicos competentes. [5] Es decir, la Geistesmasse de Herbart y Riemann. Bernard Riemanns Gesammelte Mathematische Werke, editorial H. Weber (Nueva York: Dover Publications, reedición de 1953); "Zur Psychologie und Metaphysik", "Erkenntnistheoretische", y "Naturphilosophie", págs. 509–538. El concepto de la noción de un principio físico universal en tanto objeto del conocimiento suprasensorial (Geistesmasse), en vez de una mera generalización matemático–reduccionista formal, es el quid implícito aplicable, aplicable a una ciencia de la economía física, del método de Riemann. Compara la noción de Riemann de la Geistesmasse con sus referencias a un "principio de Dirichlet". [6] C.P. Snow, Two Cultures and the Scientific Revolution (Londres y Nueva York: Cambridge University Press, 1959; reedición de 1993). [7] Es decir, la noción de Riemann de la Geistesmasse. [8] De nuevo, la noción de Riemann de la Geistesmasse. [9] A mediados del siglo 18 Euler, entonces radicado en Berlín, se unió a la sabandija de Maupertuis y otros en una rabiosa campaña contra el principio de Leibniz de un cálculo infinitesimal, contra el descubrimiento de Leibniz de un principio de acción física mínima universal. Mientras vivió y estuvo activo el gran Moisés Mendelssohn, los fanáticos empiristas de Berlín alrededor de Euler se cuidaron de atacar al gran platónico Mendelssohn o a su amigo Gotthold Lessing, a quien Abraham Kästner patrocinaba. Cuando Euler salió de Berlín, dejando ahí a su pupilo Lagrange en su lugar, el surgimiento de las doctrinas de Emanuel Kant se convirtió en la forma de la corrupción romántica que expresaba la impotencia psicosexual tanto de Euler como de Kant (con su "I Kan't", "no puedo") en el modo romántico popular del siglo 19. [10] De ahí la noción de una geometría "constructiva" o "física". [11] Cf. Bal Gangadhar Tilak, Orión (1893). [12] Riemann, disertación de habilitación, op. cit., págs. 272–273. [13] Por ejemplo, luego de la Guerra Civil estadounidense, muchos de aquellos que antes se habían opuesto a la esclavitud se volvieron contra las políticas culturales de personalidades tales como Frederick Douglass (el desarrollo de las facultades superiores conocidas de la mente humana, es la libertad del alma mediante la cual ha de ganarse la libertad del cuerpo). Propusieron que no se educara a la masa de esclavos liberados más allá del nivel de la condición de empleo que se esperaba de ellos. Ese es un extremo obvio. No obstante, debe dirigir nuestra atención a una grotesca farsa general que se practica ampliamente en nombre de la educación secundaria y también de la superior hoy día. De modo parecido, cuando se hizo obvio que no podía pararse del todo la ola de progreso científico y cultural que desató el Renacimiento del siglo 15 de Europa, las principales facciones de Venecia (tanto la antigua facción del siglo 16 relacionada con Francesco Zorzi, el consejero matrimonial de Enrique VIII de Inglaterra, como la mentada facción nueva de Venecia, la de Paolo Sarpi y su lacayo doméstico Galileo Galilei) decidieron adaptarse a los efectos inevitables del Renacimiento adoptando una cierta versión desmantelada de ciencia moderna (el neoaristotelismo veneciano, el empirismo neooccamista), pero prohibiendo formas de educación que pudieran estar diseñadas para fomentar el conocimiento de ese principio de la hipótesis platónica de la cual dependen las formas válidas de progreso científico de forma más o menos absoluta. Federico Schiller ha descrito tales formas reduccionistas de educación como fábricas de "Brotgelehrte" (gente no educada por encima del nivel necesario que la capacite para ganarse el pan). Este es el enfoque a la educación y al entretenimiento popular escogido para los esclavos que predomina en la política de la práctica educativa estadounidense actual, en especial desde el impacto del descenso en el "paradigma cultural" posterior a 1963 en las políticas de la educación secundaria y superior actuales. [14] El uso del término "ultramontano" para identificar las políticas contra el Estado nacional de la oligarquía financiera veneciana y su aliada, la nobleza normanda, tiene sus orígenes en la afirmación fraudulenta de que la autoridad del papa constituía el poder imperial que imponía la ley, y que le confería una llamada "Donación" de esa autoridad sobre Europa Occidental por parte del emperador romano bizantino Constantino. El imperialismo de los Habsburgo–Habsburgo, del modelo liberal angloholandés de los siglos 18 y 19, de los intereses financieros (o sea, la Compañía de Indias), y de los dogmas contemporáneos del "libre comercio" y otros de la "globalización", representa una continuación del empeño de la oligarquía financiera veneciana de imponer una doctrina ultramontana. [15] Es decir, una forma de sociedad, una forma presidencial de república soberana libre de la forma de males tanto del reinado Habsburgo medieval como de la tradición veneciana de un modelo liberal de democracia parlamentaria del siglo 18 dominada por los financieros. [16] Lo que se llegó a conocer como "fascismo" en el período de 1922–1945 fue fruto de la escuela romántica de derecho fundada por Hegel y Savigny, quienes quedaron embelesados a este efecto por el modelo del ascenso de la tiranía de Napoleón Bonaparte. Las doctrinas de Scalia del "texto" y el "valor del accionista" combinan ese legado del jurista de la Corona de la Alemania nazi, Carl Schmitt, con la retrógrada doctrina lockeana del preámbulo de la Constitución de los Estados Confederados de América. [17] A Urquhart, un oficial veterano del servicio de inteligencia exterior británico, lo asignaron, bajo su rival, al antiguo protegido de Jeremías "Principios de las Costumbres y la Legislación" Bentham, lord Palmerston, para instalarse en la Biblioteca Británica, en donde sirvió al Ministerio de Relaciones Exteriores británico como secretario correspondiente de la "Joven Europa" y la "Joven América", mismas que dirigía el Giuseppe Mazzini de Palmerston. Fue a través de este canal que el agente de la "Joven Europa" de Mazzini, Carlos Marx, recibió ayuda para sus estudios de economía política bajo la guía personal de Urquhart, y fue el agente de Palmerston, Mazzini, quien personal y públicamente nombró a Marx líder de la recién fundada "Primera Internacional". Es notable, por el contraste pertinente, que el padre de Marx, Heinrich, se encontraba entre los simpatizantes de la causa de la Revolución Americana, y que el propio joven Marx cursó sus estudios secundarios en Tréveris, Alemania, con el famoso humanista clásico y becario de los Hermanos de la Vida en Común, J.H. Wyttenbach. Luego, tras pasar su adolescencia en Tréveris, Marx se pasó al bando opuesto, al del romanticismo hegeliano y poshegeliano, y cayó bajo la influencia de las operaciones de Bentham, Palmerston y Mazzini del Ministerio de Relaciones Exteriores británico. Todo arroja una luz extremadamente saludable para nuestros putativos antimarxistas derechistas amantes de Adam Smith de nuestros días, así como para los economistas estadounidenses y europeos occidentales típicos de formación académica. [18] Lyndon H. LaRouche, The Economics of the Noösphere (Washington, D.C.: EIR News Service, 2001). [19] El reduccionista, al igual que el patético Emanuel Kant (o mejor dicho, "I Kan't", "no puedo"), es incapaz de resolver la paradoja ontológica pertinente. Contrario a la ilusión histérica del reduccionista, Dios (el Creador) puede cambiarse a sí mismo conforme a un principio de cambio que constituye Su forma esencial de existencia cognoscible (es decir, como Geistesmasse). Cf. Filón ("el judío") de Alejandría, respecto a la teología falsa e incompetente del legado aristotélico de la época de Filón. Si el reduccionista no fuese un gnóstico, reconocería la naturaleza de su error. [20] (Lawrence: University of Kansas Press, 1958). [21] Daedalus (Primavera de 1962). [22] Esto obedeció a una combinación del contenido de la biblioteca de mi familia, que incluía los clásicos de Harvard y colecciones similares de obras de referencia y textos particulares, y lo que yo pude complementar a partir de una variedad respetable de obras completas pertinentes que pude sacar de la biblioteca pública de Lynn, Massachussets, o estudiar como obras de referencia disponibles en el salón de lectura de dicha biblioteca. En años posteriores, la Biblioteca Pública de Boston, que está en Copley Square, se convirtió también en uno de mis lugares predilectos. ¿Dónde hay bibliotecas como esas? ¿En casa? O, ¿son del dominio público, accesibles a los jóvenes y adolescentes hoy día? [23] V.I. Vernadsky (1863–1945). [24] Cf. LaRouche, The Economics of the Noösphere, op. cit. [25] ibid. [26] ibid. [27] Desde la óptica de la ciencia, la lección que se desprende de la experiencia de la Unión Soviética de 1917–1991 y que provoca una impresión más impactante, es el papel trágico que tuvo el dogma "antivoluntarista" socialdemócrata, mismo que, irónicamente, el prócer soviético V.I. Lenin infringió en extremo, al prever que toda la tradición socialdemócrata, como todas las corrientes liberales y otras corrientes políticas que se oponían al dominio zarista estaban de suyo condenadas al fracaso, en un modo y grado que ha de considerarse, en retrospectiva, como congruente con las observaciones de Kubie sobre "la distorsión neurótica del proceso creativo". Así, en el dominio de los programas soviéticos con un motor científico, llevados a cabo por imperativos militares y otros imperativos estratégicos existenciales de la misma especie, el efecto neto es que se pasaron por alto los dogmas antivoluntaristas de los socialdemócratas y de la burocracia bolchevique. En otros aspectos de la economía donde hubo resistencia a esa orientación a la misión, la literatura soviética del período de 1954–1991 documenta una alarmante persistencia del desastre neurótico (antivoluntarista). Nosotros experimentamos un caso paralelo en el cambio de la política estadounidense hacia una orientación "posindustrial" tras la era de Kennedy. Los efectos desastrosos acumulados de la combinación de las ideologías "posindustrial" y del "libre comercio" radical, en especial las del fanatismo "librecambista" de extrema derecha de la Sociedad Mont Pelerin, han tenido efectos radicalmente más mortales en las economías de América y Europa Occidental, desde más o menos 1971–72, que los que las corrientes "antivoluntaristas" generaron para arruinar la economía soviética. De ahí que la situación de la infraestructura económica básica estadounidense hoy sea, en términos relativos, mucho peor que cuando Franklin Roosevelt asumió la Presidencia en marzo de 1933. [28] La noción de experimentos únicos que destaca Riemann evita el descuido sofista de usar el término "experimento decisivo". [29] Las implicaciones políticas y económicas de esa defensa de mis causas es, principalmente, lo que me convirtió a mí en lo personal, y también a mis asociados, en objeto de una difamación y ataques políticos de un odio feroz desde dentro del gobierno y otras partes, en el transcurso de los 1970 y después. [30] Cuando Mefistófeles se le aparece a Fausto, en La trágica historia del doctor Fausto de Christopher Marlowe, lo hace vestido con hábitos clericales, como los de Torquemada. Las criaturas más satánicas son las que siguen la tradición del ángel caído, como los clérigos seguidores de la secta de personajes tales como Torquemada y el Federico Nietszche de Hitler hoy. El papel que tuvo la Inquisición ibérica de Torquemada y compañía en el comercio trasatlántico de esclavos, una práctica que la monarquía española del siglo 19 continuó aun después del asesinato del presidente estadounidense Abraham Lincoln, es un reflejo de la misma maldad que produjo un monstruo similar con un ropaje diferente, Adolfo Hitler. Por tanto, los tontos del mundo conocen al genocida Rusell como un "gran pacifista", quien, más bien, es el sacristán de un cementerio planetario de la humanidad. Ver los escritos de Joseph de Maistre, el principal ideólogo sinarquista (martinista) del período de la Revolución Francesa y de la tiranía de corte hitleriano de Napoleón, sobre la Inquisición como modelo para lo que se convirtió en la tiranía fascista de Hitler. [31] El término "psicodélico", como se aplica a la ergotamina sintética de la Clínica Tavistock de Londres, el LSD, fue diseñado como un truco propagandístico, a fin de evitar las implicaciones peyorativas del término original, francamente descriptivo, "psicotomimético", por los estados mentales psicóticos a los que ciertas drogas inducen, y también por cierta variedad de pseudomúsica monótona simiesca en la tradición de la antigua secta frigia de Dionisio. [32] La carrera de la excreción de la Universidad McGill de Canadá, Zbigniew Brzezinski, comenzó en el departamento de Gobierno de la Universidad de Harvard bajo la tutela del notorio profesor William Yandell Elliott, figura destacada de esa asociación rememorativa del Ku Klux Klan conocida como los Agraristas de Nashville. Aunque Elliott sacó a Brzezinski de Harvard para meterlo en los círculos patrocinados por Averell Harriman y darle cabida al recién adoptado protegido principal, Henry A. Kissinger, la vieja alianza entre Brzezinski y Samuel P. Huntington, famoso por lo del "choque de civilizaciones", ha perdurado desde que Huntington sacó sus perennes doctrinas militares bajo el modelo de la Waffen–SS en The Soldier and the State, de las que el vicepresidente Cheney se hace eco en su dogma de la "guerra nuclear preventiva". La autoría de Brzezinski de una propuesta sociedad "tecnetrónica" tiene una pertinencia en particular notable, al proponer la sustitución de la práctica económica y científica física en la sociedad en general, por las doctrinas de Bertrand Russell, Norbert Wiener y John von Neumann. [33] Como lo destacó Von Braun al comparar una misión a Marte con la confianza que Colón depositó en una flotilla de barcos, siguiendo el mapa de Toscanelli en busca de tierra al otro lado del Océano Atlántico. [34] La razón por la que escogí el trabajo de Gauss de 1799, El teorema fundamental del álgebra, como eje de la experiencia educativa de mi movimiento de juventudes, compuesto primordialmente por adultos jóvenes en edad universitaria, sobre todo de entre los 18 y 25 años de edad, fue que el ataque de Gauss contra Euler, Lagrange, etc., junto con su reproducción implícita del razonamiento de los pitagóricos preeuclidianos sobre la línea, el cuadrado y el cubo, ofrece a un grupo de estudiantes, por ejemplo, en un diálogo socrático en un grupo de 15 a 25 estudiantes, el ejemplo más directo y relativamente más simple del significado práctico del término "principio físico universal" y, así, de la clase de ilustración más sencilla de las facultades demostrables específicas a la mente humana que ubican al hombre aparte y por encima de las bestias. [35] Como siempre es el caso conmigo, mi uso del término "principios físicos universales" incluye, de forma implícita, las formas clásicas de composición artística. La distinción estriba en que, lo que habitualmente identificamos como principios físicos universales, pertenece a la perspectiva que la mente individual soberana tiene de los dominios abiótico y biótico en conjunto, en tanto dominios experimentales. La composición artística clásica enfoca la atención de las facultades cognoscitivas del individuo en las clases de principios físicos universales que se expresan mediante los procesos sociales como tales. Por ejemplo, el estudio de la historia en tanto estudio de la experiencia de generar, transmitir y aplicar ideas que corresponden al acto de descubrimiento (o redescubrimiento de principios físicos universales originales), es la historia de la conceptualización de las relaciones sociales en una forma de ciencia física. [36] El hecho de que el valor nominal de una unidad en el inventario de vehículos usados en las agencias de automóviles nuevos, como se refleja en la situación comparable actual, era mucho mayor al de un vehículo de la misma marca y modelo en condiciones comparables en el mercado abierto, es típico de la situación de 1956. Este estado de cosas, producto de las medidas de Arthur Burns, et al. en el Gobierno de Eisenhower, fue lo que precipitó la profunda recesión estadounidense de 1957–1960. La crisis estadounidense actual es cualitativamente mucho, pero mucho peor que la situación a fines de 1956, aunque, no obstante, en general es análoga en aspectos importantes. [37] Mi primer pronóstico fue uno de corto plazo a fines de 1956. Esto se hizo en la forma de un memorando interno sobre la crisis de recesión de principios de 1957, para la firma consultora de la cual yo era miembro del equipo ejecutivo en esa época. Mi primer pronóstico de largo plazo vino en 1959–1960, como continuación del estudio hecho para el notablemente exitoso pronóstico anterior de corto plazo de 1956–1957. Este pronóstico alcanzó una circulación bastante amplia a fines de los 1960. Su éxito, en agosto de 1971, llevó a mi debate público con el profesor Abba Lerner ese otoño, debate que gané, pero que representó una victoria que hizo que me consideraran un adversario peligroso al que debía aislarse y difamarse, cada vez más y de ahí en adelante, entre los principales economistas académicos, ciertas casas financieras y otros. [38] La parte principal de mis descubrimientos, desarrollados primero en el transcurso del período de 1948–1953, se hizo como refutación al alegato central de la Cibernética de Norbert Wiener y las nociones muy relacionadas del "análisis de sistemas" y la "inteligencia artificial" de John von Neumann. La aplicación inicial de mis descubrimientos se hizo en oposición a la doctrina de "torre de marfil" de la "investigación de operaciones" de Tjalling Koopmans y otros. Esta refutación de la investigación de operaciones descansaba de forma significativa en un estudio de la influencia de Leontief y demás en la apreciación de la contabilidad nacional del producto y el ingreso. El significado de mis diferencias con la noción de Kondratieff y Leontief de las "ondas largas" aparece más delante en esta discusión. [39] Galileo Galilei, el lacayo doméstico del fundador del empirismo moderno, el veneciano Paolo Sarpi, representa a los empiristas de los siglos 17 y 18. El intento de Galileo de plagiar la obra de Kepler introduciendo el concepto de torre de marfil del empirista, de la "acción a distancia", es típico del empirismo en general. [40] Tal valor del trabajo no es una constante de suyo evidente, sino que es variable según el poder tecnológico que la sociedad requiere, y el nivel de progreso tecnológico en curso que ha de alcanzar esa sociedad. En otras palabras, no es el trabajo per se lo que representa el valor físico, sino el trabajo generado en una sociedad desarrollada y en desarrollo. Es el costo físico de producir esa calidad promedio de trabajo de los hogares de una sociedad en un estado dado de desarrollo lo que representa el precio verdadero atribuible al ingreso físico de los hogares de los que proviene ese trabajo. Es cierto que en condiciones especiales, como en la guerra o en una depresión económica, podemos vernos obligados a posponer el pago cabal de esa calidad de trabajo; sin embargo, en el transcurso de una generación o dos (es decir, de 25 a 50 años) tenemos que llevar el ingreso físico de los hogares al nivel de una media cultural congruente con las metas adoptadas de desarrollo tecnológico y social relacionado. [41] Corintios I:13 ilustra el punto de modo más memorable, de que son los principios universales, y no los códigos compuestos de leyes básicas particulares, los que definen una conducta moralmente aceptable entre la gente. [42] La señora Joan Robinson, de Cambridge, cuyos círculos nunca han sido amigos míos, en cualquier caso ha gozado de mi repetido y sincero apoyo a su totalmente justificada ridiculización del perverso Friedman, como el economista del post hoc ergo propter hoc. Friedrich von Hayek, de la Sociedad Mont Pelerin, define que esa asociación está dedicada a promover al Bernard Mandeville que insistía que el fomento de la libertad de practicar los vicios privados, del modo que lo han hecho Milton Friedman y George Soros, era el camino a la prosperidad de la sociedad. De manera consistente, el compinche de Von Hayek, Friedman, al igual que el desagradable George Soros, defendió con vigor la legalización del tráfico ilegal contemporáneo de estupefacientes que efectúan las FARC de Colombia y sus cómplices. [43] Ver Rachel y Alan Douglas, The Trust, mss. [44] El poder de la monarquía británica era el de un imperio, no el de una nación. [45] Esta doctrina de "propiedad", del modo que Locke, Quesnay, Mandeville, Adam Smith, etc. la adoptaron, es el rasgo traidor principal del preámbulo de la Constitución de la Confederación, en la que los representantes de entonces de lo que hoy llamamos la internacional sinarquista se apoyaban para defender la esclavitud, del modo que la noción del "derecho a la propiedad" de Locke la definía. Las monarquías española y portuguesa han usado esta misma doctrina de "propiedad" desde principios del siglo 16, para autorizar a las capas dirigentes ibéricas a crear el comercio trasatlántico de esclavos africanos. Cuando los holandeses y los británicos se apoderaron de gran parte del mundo a fines del siglo 17 y en el 18, copiaron la "lógica" española a este respecto. La Compañía de las Indias Orientales británica abandonó el uso de sus botes (y los del traidor Junto de Essex de EU) en los 1790, para pasarse al negocio más redituable del tráfico de opio. Entonces, le dejaron el trabajo sucio de la trata de esclavos africanos a la marioneta de los británicos, la monarquía española del siglo 19. [46] Esta doctrina de Euler, Lagrange, Laplace, Cauchy, etc. contra Leibniz, se basaba en las formas sucesivas del argumento esencial de Aristóteles, Galileo, Descartes y Newton contra Sócrates. Esto se refleja en la respuesta de J. Clerk Maxwell, quien, cuando se vio desafiado ante su negativa de reconocer que su obra dependía en gran medida de descubrimientos importantes de Gauss, Weber, Riemann, etc., respondió que "nos" rehusamos a aceptar cualquier geometría que no sea la nuestra, refiriéndose con "la nuestra" a los dogmas apriorísticos de torre de marfil de Aristóteles, Galileo, Descartes, Newton y demás. Esta fue la misma posición que Euler y Lagrange adoptaron antes en su odio fanático contra Leibniz. [47] Toma el caso de la economía soviética como ejemplo. Según las versiones en esencia empiristas, radicales, prácticamente anarcosindicalistas, del dogma de Marx y Engels, por ejemplo, se alega que la creatividad de la economía fluye de las "manos callosas" de las "masas" trabajadoras, y que la "intelectualidad" (como los científicos) constituye un germen inevitable y por desgracia necesario de perversidad contrarrevolucionaria. A pesar de los destacados logros de la intelectualidad científica soviética, la economía de ese país zozobraba en medio del pesimismo dogmático y la decadencia económica que emanaban de los conceptos simplistas de los británicos Thomas Huxley y Federico Engels, al efecto de que el hombre desciende de los simios superiores. Esta doctrina "obrerista" suicida de la variedad anarcosindicalista de la ideología socialista, también sirvió de base axiomática a los dogmas de los socialdemócratas Kautsky y Plejanov, y también a un núcleo de la propia facción bolchevique de Lenin, en sus alegatos contra la visión "voluntarista" de la historia. [48] Como lo hemos documentado mis colaboradores y yo en varias publicaciones, las peculiaridades de los nexos pertinentes de Gibbon con el tema de este informe son, en esencia, las siguientes: Gibbon, quien alguna vez pretendiera a Suzanne, la esposa del infame Jacques Necker, era un íntimo asociado de los círculos de Voltaire en Ferney. Los acontecimientos decisivos en las carreras de ambos, Necker y Gibbon, se ubican en el intervalo de 1763–1790, el período del ascenso de la Compañía de las Indias Orientales británica de lord Shelburne en la forma, de hecho, del Imperio Británico, ya en ese período. Fue en este mismo período que los agentes útiles franceses de la Compañía de las Indias Orientales, de la secta francmasónica martinista, prepararon los sucesos de 1789–1815 que pusieron fin a todo desafío francés futuro al Imperio Británico, hasta la fecha. Estos círculos se entrelazan íntimamente con los fisiócratas que, como figuras decisivas de la Ilustración, desempeñaron un papel crucial y complementario al de los martinistas tanto en el Terror francés como en la tiranía de Napoleón Bonaparte. Las opiniones de Gibbon en su Historia, y las medidas económicas de la Compañía de las Indias Orientales que han tenido, de forma repetida, efectos tan ruinosos para la economía estadounidense, deben entenderse a la luz de estas peculiaridades del caso de Gibbon. [49] La riqueza de las naciones de 1778 de Adam Smith, no sólo fue una obra propagandística de la Compañía de las Indias Orientales británica contra la independencia de EU, sino que desde 1763 a Smith ya lo había reclutado su patrón, el lord Shelburne de la Compañía de Indias, para trabajar en un plan destinado a quebrar la economía de las colonias norteamericanas angloparlantes. La predilección de Adam por esas nociones de corte cátaro no empezó en 1776 con La riqueza de las naciones. En su obra de 1759 La teoría de los sentimientos morales, ya insistía en la existencia de un "Gran Director de la Naturaleza" que manipulaba a hombres y mujeres para su propio provecho mediante sus vicios. Nociones similares impregnan la tradición empirista hasta la actual devoción religiosa pagana a "la magia del mercado". [50] Bernard Mandeville, La fábula de las abejas: vicios privados, virtudes públicas (1714, 1734). La Sociedad Mont Pelerin de Von Hayek y Milton Friedman adoptó a Mandeville como su "non santo patrón". Cf., Sobre Mandeville y su influencia, ve How the Nation Was Won, por Graham Lowry, vol. I (Washington, D.C.: Executive Intelligence Review, 1988). [51] El fraude intencional de Claudio Ptolomeo se basaba en la doctrina de Aristóteles. La misma "autoridad" de Aristóteles fue la fuente de los crasos errores de Copérnico y de Tico Brahe, así como de la resurrección del fraude aristotélico de Ptolomeo —dirigido por Venecia (es decir, por Zorzi)— contra el Renacimiento a principios del siglo 16. En la práctica matemática moderna, donde aparece "euclidiano", ha de leerse "aristotélico", o el empirismo occamista neoaristotélico de Paolo Sarpi y compañía. [52] John Maynard Keynes, "Newton the Man", en Essays in Biography (Nueva York: The Norton Library, 1951). [53] (1677–1748). [54] The Controversy Between Leibniz and Clarke (1715–56), en Gottfried Wilhelm Leibniz: Philosophical Papers & Letters, Leroy E. Loemker, ed. (Dodrecht: Kluwer Academic Publishers, 1989), págs. 675–721. [55] Ve a Leibniz en The Origin of the Calculus. El primer informe importante de Leibniz respecto a su descubrimiento del cálculo lo presentó a su impresor de París en 1676, poco antes del regreso de Leibniz a Alemania de su trabajo de 1672 a 1676 con Christiaan Huyghens y demás, bajo el patrocinio del ministro Jean–Baptiste Colbert. El trabajo inicial de Leibniz sobre el cálculo, cuando se junta con el desarrollo de Leibniz y Bernouilli de la noción de un cálculo físico infinitesimal inherente a un principio de acción física mínima universal, es el principal antecedente de El teorema fundamental del álgebra de Gauss. La noción prácticamente inservible de las fluxiones de Newton fue, a lo más, un simple refrito de series matemáticas simples que no tenían nada que ver con la cuestión de las singularidades físicas en las pruebas experimentales, lo cual constituye el eje de cualquier noción física competente de la función de un cálculo matemático. [56] Georg Cantor, Gesammelte Abhandlungen mathematischen und philosophischen Inhalts. (Berlín: Verlag von Julius Springer, 1932; reimpreso en 1990), págs. 165–209, y 378–439. Para la documentación de la demencia posterior de Cantor, ve a Georg Cantor Briefe, Herbert Meschkoski and Winfried Nilson, eds. (Berlín: Springer–Verlag, 1991). [57] (Nueva York: Dover Publications, reedición de 1952 y 1953). El uso que hace Cantor del "hypotheses non fingo" en los Beiträge. . . de 1895–1897, es puro cuento. Comparen esto con la correspondencia de Cantor con el cardenal Johnnes Baptist Franzelin, S.J., en Meschkowski–Nilson, págs. 252–258. En cuanto al Cantor anterior, ve las notas del Gesammelte Abhandlungen, págs. 204–205, sobre las raíces de la obra de Cantor en los pitagóricos, Platón, Nicolás de Cusa y Leibniz. La prueba es que, en efecto, al Cantor de los 1890 le lavaron el cerebro sus torturadores Kronecker y compañía. Sujeto a un tratamiento parecido de los seguidores de Ernst Mach (en el período de la guerra de 1914–1917), Max Planck probó ser más resistente.
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