15 de mayo de 2024 (EIRNS) — El Secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, llegó ayer a Kiev, en una visita que no había sido anunciada. El Departamento de Estado informó que Blinken "se reunió hoy [14 de mayo] en Kiev con el Presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski. Ambos hablaron de las últimas novedades en el campo de batalla y de la importancia de la recién llegada ayuda de seguridad desde Estados Unidos para ayudar a repeler los ataques rusos. También hablaron de los acuerdos de seguridad a largo plazo y del trabajo para garantizar que Ucrania pueda prosperar económicamente. El secretario Blinken reiteró el apoyo permanente de Estados Unidos a la soberanía, independencia e integridad territorial de Ucrania y nuestro compromiso con la recuperación de este país". 

Las agencias Associated Press y Reuters informaron que Blinken le dijo al mandatario ucraniano que "a corto plazo, la ayuda ya está en camino, parte de ella ya ha llegado y llegará más", y agregó que "va a marcar una diferencia real contra la agresión rusa que está produciéndose en el campo de batalla". Por separado, un funcionario estadounidense que viajaba con Blinken dijo a la prensa que el objetivo de la visita de Blinken es "enviar una señal firme de tranquilidad a los ucranianos que, obviamente, pasan por un momento muy difícil" y explicar en detalle cómo la ayuda estadounidense ayudará a las fuerzas de Kiev a "recuperar la iniciativa en el campo de batalla". 

Zelenski, según el corresponsal de la BBC, Tom Bateman, le insistió a Blinken que las tropas ucranianas han pasado por lo que denominó un "período difícil", sobre todo en el este del país. Agradeció a Blinken el "importante paquete" de ayuda militar. Al parecer, Zelenski empleó el tiempo pasado ("han pasado" por un período difícil) dando a entender que el "período difícil" había quedado atrás. 

Sin embargo, la cosa se puso más dura. Blinken recalcó en su mensaje que todo el mundo libre estaba en juego en Ucrania, al dirigirse al bar subterráneo Bar Diktat de Kiev, para mostrar a los soldados en la primera línea por qué están luchando. Con la guitarra eléctrica en la mano, se subió al escenario y cantó "Rockin' to the Free World" (Rockeando por un mundo libre). 

En casos así, lo habitual es sacudir la cabeza y aconsejar al ejecutante que se quede con su trabajo diario. Sin embargo, a pesar de lo patético de la voz, en este caso tal vez podría hacerse una excepción y el secretario de Estado podría dejar el empleo fijo que tiene.